Este ejercicio estimula principalmente el glúteo, los femorales y la espalda. Hay que tener cuidado con la posición de la espalda durante la ejecución de las repeticiones, para evitar lesiones. Siempre la espalda recta, llevando las caderas hacia atrás y manteniendo la barra junto a las piernas.
Para equilibrar la carga en la fuerza de agarre, se recomienda un agarre mixto de la barra, una mano en posición supina, con la palma de la mano de abajo hacia arriba de la barra, y la otra mano en posición prono, con la palma de la mano de arriba hacia abajo.
El agarre puede ser a la anchura de los hombros, talones situados en eje con los hombros. Apoya el antebrazo en la parte lateral de las pantorrillas. Cadera hacia abajo, como en posición de sentadilla profunda, cabeza levantada, hombros arriba, pecho hacia adelante, toma aire y sostenlo, sube con las manos siempre lo más juntas a las piernas.
Las caderas deben hacer un movimiento de bisagra, de adelante hacia atrás, evitando que sea de arriba hacia abajo como en una sentadilla. Pecho y hombros hacia adelante, sin dejar que la espalda pierda la posición erguida. Puedes bajar la barra hasta la mitad de las pantorrillas para volver a subir sin perder la técnica de ejecución. Este ejercicio es bastante demandante del sistema muscular, neurológico y cardiovascular, razón por la cual un descanso adecuado entre series es recomendable, puede ser superior a 2 minutos y medio.
Alterna el agarre de las manos entre las series, y las repeticiones deben ser con un peso ligero mientras dominas la técnica, con el tiempo podrás aumentar la carga y obtener mejores resultados.